La mejor inversión que podemos hacer en nuestra familia y en nuestros hogares es prestar atención a lo que sucede a nuestro alrededor. En el ámbito doméstico pueden existir otros organismos que viven entre nosotros y que muchas veces se nos hace difícil percatarnos de su existencia. Una mancha o un olor diferente nos puede dar la clave acerca de quién más vive en nuestro hogar.
El moho (hongos) se reproduce por medio de pequeñas esporas. Estas esporas se transportan continuamente en el aire libre así como en interiores. Cuando las esporas se depositan en una superficie húmeda comienzan a crecer y a alimentarse de la superficie a la cual están adheridas.
Factores ambientales
El hongo se encuentra casi en todas partes; puede crecer en casi cualquier superficie o sustancia siempre y cuando haya humedad. Hay hongos que pueden crecer en madera, papel, alfombras y comida.
Existen muchos tipos de moho, pero ninguno crecerá sin agua o humedad. Los lugares que suelen ser, o que siempre son húmedos pueden ser difíciles de mantener completamente libres de moho. Si hay moho en la ducha, o en otro lugar del baño, que parece regresar, el hecho de aumentar la ventilación (activar un ventilador o abrir una ventana) y limpiar con mayor frecuencia suele prevenir que vuelva el moho, o por lo menos mantenerlo a un nivel mínimo.
Prevención
¿Qué puedo hacer para evitar el moho?
- La clave para controlar el moho es el control de la humedad.
- Si el moho es un problema en su hogar, debe limpiar el moho en cuanto antes y resolver el problema del agua.
- Es importante secar los lugares y objetos dañados por el agua en las siguientes 24 a 48 horas a fin de evitar que crezca el moho.
- Procure una correcta ventilación y calidad del aire