El ventilador axial suele incorporar aletas directrices, colocadas en la salida o en la entrada del aire, con el propósito de disminuir la rotación del fluido descargado, lo que se traduce en un mayor aprovechamiento de la energía que suministran las palas de la rueda.
Sus prestaciones están muy influenciadas por la resistencia al flujo del aire y un pequeño incremento de la presión provoca una reducción importante del caudal. La dirección de la corriente es puramente axial, de modo que la construcción del ventilador se adapta perfectamente para su incorporación directa en la conducción.
Las aletas, de perfil aerodinámico, se disponen radialmente en torno al moyu y su ángulo de ataque es regulable en paro, lo que permite adaptar el ventilador a condiciones de servicio variables. Utilizados para aplicaciones industriales, bajo condiciones de servicio severas y permanentes, en ambientes con altos porcentajes de humedad relativa y temperaturas que van de -25ºC hasta 80ºC.
Se utilizan para mayores presiones que los helicoidales. Trabajan vertical u horizontalmente. Pueden ser de acople directo o accionado por poleas y correas. Son fabricados con hélices de fundición de aluminio o polipropileno.