La ventilación mecánica es una mejor solución de cara a edificios nuevos, ya que los conductos pueden instalarse durante la construcción de las viviendas o las oficinas.
Implementada de manera integral desde el inicio de diseño del edificio, es la solución más eficaz de cara a mejorar la salud de quienes habiten las estancias y también para garantizar una correcta eficiencia energética en los edificios.
Para ello, el sistema de ventilación mecánico de doble flujo es la mejor manera de implementar la renovación del aire en interiores:
- La salud mejora en interiores al respirar un aire puro y de calidad. Siempre que el aire se ensucia, es extraído por el sistema de ventilación y expulsado fuera de los edificios, ya sea por generarse aire viciado o por contaminarse con los humos de la cocina. Mediante otra red de conductos, el aire se introduce del exterior y se filtra previamente. Al mantener las ventanas cerradas, se respira el mejor aire posible.
- Gracias a un buen aislamiento térmico, el sistema de doble flujo es capaz de convertir el aire frío de la calle en cálido en invierno, y al revés en verano, mediante una unidad de recuperación de calor.
La elección entre ventilación híbrida o mecánica dependerá de estas necesidades y también de si se trata de un edificio por reformar, situación en la que es buena alternativa la Ventilación Híbrida Controlada (VHC).